Cielos oscuros cruzan Santiago, vía Conchalí
Palomas se desprenden de los techos
(Sueño que vamos por 1920 y como un globo de navidad
La Virgen vaga hacia Cisterna.
La Cordillera está ahí nevada,
pero, yo soy un pobre diablo de la Plaza Brasil,
uno que bailaba boogie al viento en los cafés.
Mi casa derrumbada tras un mar de corbatas
colgadas de los mástiles: Rosas con Teatinos
Gath y Chávez abre sus puertas)
Alessandri dispara quimeras a la Población.
Escuchen la noche extensa sobrevolar departamentos numerados,
el agua detenida dentro de las camas.
Y automóviles perdidos.
Otros vivieron a orillas de los ríos
sentados en el Desierto de Atacama, pero yo
vivo en lo alto de la Plaza Bulnes
y oigo el rumor de los barrios al atardecer
Las Ovalle Negrete van y vienen;
yo pienso en todo cuanto existe entre Mapocho y Franklin,
(Balmaceda murió en esa casa de Amunategui
y O´Higgins se fue al exilio caminando por San Pablo).
..... Viejas canciones recorren la ciudad durante el día;
..... pienso en los cines.
..... torres de altura cubren el adobe
Dos cerros verdes
Y una mujer, que amo.
sábado, 17 de diciembre de 2011
lunes, 21 de noviembre de 2011
"Una lágrima seca" por: Jonathan Minila para la Revista Lenguaraz
Se alejó hasta donde nadie conociera su nombre. Se sentó en la banqueta, debajo de un edificio de departamentos, y comenzó a llorar. Él, sin saberlo, en el segundo piso, comenzó a escribir una carta a una mujer con el mismo nombre. La vida es así.
Arrugó la hoja y la lanzó por la ventana.
¿Qué sentido tenía si estaba muerta?
La carta inconclusa cayó a pocos metros de Cristina. Secó sus ojos, la levantó y leyó:
Jamás leerás esta carta, pero no importa: necesitaba escribirte. Pienso en ti y en tu muerte. Te fuiste con lágrimas en los ojos y no puedo soportarlo. Por favor, donde quiera que estés deja de llorar…
Cristina doblo la carta y la guardó en el bolsillo de su pantalón. Volteó a buscar la ventana por donde había sido lanzada y una ráfaga de viento le arranco una lágrima que se secó en el pavimento unos segundos después
Arrugó la hoja y la lanzó por la ventana.
¿Qué sentido tenía si estaba muerta?
La carta inconclusa cayó a pocos metros de Cristina. Secó sus ojos, la levantó y leyó:
Jamás leerás esta carta, pero no importa: necesitaba escribirte. Pienso en ti y en tu muerte. Te fuiste con lágrimas en los ojos y no puedo soportarlo. Por favor, donde quiera que estés deja de llorar…
Cristina doblo la carta y la guardó en el bolsillo de su pantalón. Volteó a buscar la ventana por donde había sido lanzada y una ráfaga de viento le arranco una lágrima que se secó en el pavimento unos segundos después
domingo, 20 de noviembre de 2011
De la música
Con estas manos que se elevan ligeramente del suelo
manos que alargan su sombra en horas negras
y que construyen el mundo que un día decidí inventarme
Con los tragos que afilan mis palabras
para atravezar laberintos
Con el roce de las nubes que me arrastran mar adentro
hacia una extraviada isla donde la sangre es bestia tempestiva
blanca
definitiva
Me destruyo
Entonces una caricia, puerta delatora
deja entrar la llovizna
inclinando la balanza hacia lo desconocido
hacia un destello
que me descubre de rodillas
pidiendo regresar a aquel momento del dia
en que fuego palabra y verdad
fueron pulso y melodia
manos que alargan su sombra en horas negras
y que construyen el mundo que un día decidí inventarme
Con los tragos que afilan mis palabras
para atravezar laberintos
Con el roce de las nubes que me arrastran mar adentro
hacia una extraviada isla donde la sangre es bestia tempestiva
blanca
definitiva
Me destruyo
Entonces una caricia, puerta delatora
deja entrar la llovizna
inclinando la balanza hacia lo desconocido
hacia un destello
que me descubre de rodillas
pidiendo regresar a aquel momento del dia
en que fuego palabra y verdad
fueron pulso y melodia
lunes, 7 de noviembre de 2011
domingo, 23 de octubre de 2011
Hay una voz que no termina de consumirse
que lanza dardos ardientes en una complicidad íntima
en un juego violento a favor del tiempo
en el eco de nombres volando hacia posibles orillas
Desde unos labios grises
incendiados en dolor inexperto
desde el espacio que cedemos a su voluntad
para herirnos de abismo y olvido
Trás la ventana, la belleza y nuestra risa nerviosa
dentro del ritmo de la sangre
inventábamos nuestros deseos,
aves derramando su canto sobre nuestras manos
y un destino fijo
mientras en una hoja se derramaba el rocio de la infancia
y sus dedos tamborileaban negras melodias sobre nuestros labios
que lanza dardos ardientes en una complicidad íntima
en un juego violento a favor del tiempo
en el eco de nombres volando hacia posibles orillas
Desde unos labios grises
incendiados en dolor inexperto
desde el espacio que cedemos a su voluntad
para herirnos de abismo y olvido
Trás la ventana, la belleza y nuestra risa nerviosa
dentro del ritmo de la sangre
inventábamos nuestros deseos,
aves derramando su canto sobre nuestras manos
y un destino fijo
mientras en una hoja se derramaba el rocio de la infancia
y sus dedos tamborileaban negras melodias sobre nuestros labios
viernes, 7 de octubre de 2011
horizonte mirada
Si es que vivimos es porque cada dia
un viento fugaz nos impulsa de la derrota al asombro
y el flujo íntimo de nuestra mirada regresa como auxilio que nadie imagina
y se convierte en éxtasis, en agonia y al final en brazos levantados
Es porque el aire se revela como animal enjaulado
frio y agudo
súbito e imaginario
y olvidamos la terrible pregunta
Es porque en la humedad de una luz tierna
abrimos puertas dejando entrar lo inesperado;
las madrugadas de niebla
y la llovizna que nos devora un instante divino
entre verdad y tormenta
entre luz y noches perfectas
y amanece el dia sobre dos aves
que sorprede a nuestros ojos necios
un viento fugaz nos impulsa de la derrota al asombro
y el flujo íntimo de nuestra mirada regresa como auxilio que nadie imagina
y se convierte en éxtasis, en agonia y al final en brazos levantados
Es porque el aire se revela como animal enjaulado
frio y agudo
súbito e imaginario
y olvidamos la terrible pregunta
Es porque en la humedad de una luz tierna
abrimos puertas dejando entrar lo inesperado;
las madrugadas de niebla
y la llovizna que nos devora un instante divino
entre verdad y tormenta
entre luz y noches perfectas
y amanece el dia sobre dos aves
que sorprede a nuestros ojos necios
viernes, 23 de septiembre de 2011
Soledad
...quiero prenderte fuego en un bullicio de amor
y solo cenizas en mil bocas hambrientas, áridas y amargas
y solo cenizas en mil bocas hambrientas, áridas y amargas
Tan sencilla esta vida
Asi nacemos, deliramos y levantamos el vuelo en cada mañana
con la aspiración de ser comprendidos, amados y desafiados por un misterio
lento, subito, terrible, tempestuoso y bello
pero nosotros
nosotros no sabemos de caidas ni de naufragios
ni del orden justo y aberrante que busca nuestro hombro al doblar la esquina
no sabemos de la gravedad que inhala hacia el centro
ni de la elipsis de este mundo
nosotros sabemos de la simetria entre voz y sueño
del tiempo; oscura distancia entre labios y caricia
valle por el que cruzamos la geografia de nuestros deseos
no sabemos sino es en nuestro silencio, en nuestras lágrimas
en la oscuridad perpetua en que dormimos y cantamos
con la aspiración de ser comprendidos, amados y desafiados por un misterio
lento, subito, terrible, tempestuoso y bello
pero nosotros
nosotros no sabemos de caidas ni de naufragios
ni del orden justo y aberrante que busca nuestro hombro al doblar la esquina
no sabemos de la gravedad que inhala hacia el centro
ni de la elipsis de este mundo
nosotros sabemos de la simetria entre voz y sueño
del tiempo; oscura distancia entre labios y caricia
valle por el que cruzamos la geografia de nuestros deseos
no sabemos sino es en nuestro silencio, en nuestras lágrimas
en la oscuridad perpetua en que dormimos y cantamos
viernes, 2 de septiembre de 2011
Te has probado en mi
El silencio crece y la nohce arrinconada
tirita en la luz de una vela
no habrá azul, ni viento
no más estrellas
miro hacia el cielo y encuentro su sonrisa infantil
que jamás se apartó del ruido de las cosas
y afuera el mundo no da más vueltas
Solo mi piel se convierte en lluvia, en tierra
en árbol y en un tiempo que se entorpece en la memoria
Toma mi voz de tempestad, de ella caerá una llovizna
de mi sangre toma al hombre y abre tu corazón de abismo
para volar en sus infinitos reflejos
y déjame invadir el agua del rio
para recorrer los moldes terrestres
y agitar la majestuosa luna
Toma al ave que anidó en mi mirada buscando dimensiones celestes
y mirame caer al fondo del asombro
sin deseo, ni oscuridad ni verguenza
mi nombre será una oración complicada, un murmullo
y es tu final quien se ira conmigo
tirita en la luz de una vela
no habrá azul, ni viento
no más estrellas
miro hacia el cielo y encuentro su sonrisa infantil
que jamás se apartó del ruido de las cosas
y afuera el mundo no da más vueltas
Solo mi piel se convierte en lluvia, en tierra
en árbol y en un tiempo que se entorpece en la memoria
Toma mi voz de tempestad, de ella caerá una llovizna
de mi sangre toma al hombre y abre tu corazón de abismo
para volar en sus infinitos reflejos
y déjame invadir el agua del rio
para recorrer los moldes terrestres
y agitar la majestuosa luna
Toma al ave que anidó en mi mirada buscando dimensiones celestes
y mirame caer al fondo del asombro
sin deseo, ni oscuridad ni verguenza
mi nombre será una oración complicada, un murmullo
y es tu final quien se ira conmigo
lunes, 11 de julio de 2011
"Anti-semblanza" por: Pablo Thiago Rocca, Montevideo, Uruguay (1965)
nada de esto yo viví / no hubo una enredadera
trepando el muro / en un patio del barrio la teja
las uvas no se desprendían / así
de la vieja parra / cuyos sarmientos no recogíamos
para la estufa /
en donde la noche no se demoraba /
yo no lo viví / no
nunca
sólo aquellas cosas lo recuerdan /
solas
desde un infinito de cielos perdidos
Pablo Thiago Rocca, Montevideo, Uruguay (1965)
trepando el muro / en un patio del barrio la teja
las uvas no se desprendían / así
de la vieja parra / cuyos sarmientos no recogíamos
para la estufa /
en donde la noche no se demoraba /
yo no lo viví / no
nunca
sólo aquellas cosas lo recuerdan /
solas
desde un infinito de cielos perdidos
Pablo Thiago Rocca, Montevideo, Uruguay (1965)
lunes, 4 de julio de 2011
"La vieja señora de los canarios" (fragmento) por: JOsé Saramago
"Entonces la señora de los canarios va a sentarse en una silla en la marquise, con las manos abandonadas en el regazo, medio abiertas y vueltas las palmas hacia arriba como cáscaras de almendra, como barcas encalladas. Se queda muy erguida, mientras los recuedos comienzan a fluir como olas mansas que la sumergen y la inundan, que velan sus ojos hasta caer en las manos, que son como tazas de un jardín cerrado. La casa, en estos momentos, parece cubrirse de musgo.
Uno de los canarios lanza un tímido trino. El otro responde. Y como en la casa nada se mueve y la señora mira fijamente no se sabe qué, rompen los pajaros en un canto interminable, río sonoro que se arrastra en mil brazos por la llanura de silencio. La señora no se mueve. Quiza ni oye a los pájaros pero ellos cantan, cantan, cantan"
Uno de los canarios lanza un tímido trino. El otro responde. Y como en la casa nada se mueve y la señora mira fijamente no se sabe qué, rompen los pajaros en un canto interminable, río sonoro que se arrastra en mil brazos por la llanura de silencio. La señora no se mueve. Quiza ni oye a los pájaros pero ellos cantan, cantan, cantan"
sábado, 2 de julio de 2011
Del oficio
En un controversial y malicioso escrito del siglo XIX, Spinoza define a las palabras como corderos de crianza, a los que se les procura la alimentación, el techo y el sustento. Y finaliza con la irrevocable sentencia de que algún dia crecerán y que deberemos de alimentarnos de sus fecundos resultados. Creo que todo filósofo es, desde entonces, oficialmente un vegetariano.
martes, 28 de junio de 2011
Las palabras son animales silvestres
depredadores a los que entregamos
sangre, deseos y carne
son hienas que en manada rodean
y atacan cuando el destello de sus ojos luminosos está lo suficientemente cerca
y tan exactos en su estratégia
como la vida que persiguen
Son aves de la noche
que raptan a su presa distraida para llevarla al nido
que se paraliza durante el vértigo
de su siniestro vuelo
en ocasiones son animales extasiados
que rien mientras los devoramos
porque no percibimos su sabor a tiempo, evolución y misterio
pues eso tomaría un tiempo que quizá no tenemos
Son regalos más bien extraños
cuando nos rodea el feroz invierno
y muerte violenta
cuando por descuido asomamos la cabeza
depredadores a los que entregamos
sangre, deseos y carne
son hienas que en manada rodean
y atacan cuando el destello de sus ojos luminosos está lo suficientemente cerca
y tan exactos en su estratégia
como la vida que persiguen
Son aves de la noche
que raptan a su presa distraida para llevarla al nido
que se paraliza durante el vértigo
de su siniestro vuelo
en ocasiones son animales extasiados
que rien mientras los devoramos
porque no percibimos su sabor a tiempo, evolución y misterio
pues eso tomaría un tiempo que quizá no tenemos
Son regalos más bien extraños
cuando nos rodea el feroz invierno
y muerte violenta
cuando por descuido asomamos la cabeza
lunes, 27 de junio de 2011
Ejercicio desentendido
Embestimos contra lo desconocido
buscando el pulso de un misterio
y no es el brillo de su espada que nos recibe
lo que nos hiere hasta la muerte
sino la ilusión destruida
Y no son los dias de olvido
que vuelan como aves negras en el horizonte
lo que oscurece al tiempo
sino estas manos que vencidos dejamos caer
La luna arañada con vagas promesas
regresa con la noche entre abierta
y trae en nuestro sueño desengaño fugaz
una verdad súbita y después una calma vacía
Es nuestra alma preguntándose si tiene forma
y belleza
recordandonos que vivimos aqui, aun si no vivimos
y solo el misterio enmarañado de lo terrible
sigue ahi, sin alguna duda
¿que viento pudiera transportar este cementerio de reflejos?
Tan tristes
Tan nuestros
buscando el pulso de un misterio
y no es el brillo de su espada que nos recibe
lo que nos hiere hasta la muerte
sino la ilusión destruida
Y no son los dias de olvido
que vuelan como aves negras en el horizonte
lo que oscurece al tiempo
sino estas manos que vencidos dejamos caer
La luna arañada con vagas promesas
regresa con la noche entre abierta
y trae en nuestro sueño desengaño fugaz
una verdad súbita y después una calma vacía
Es nuestra alma preguntándose si tiene forma
y belleza
recordandonos que vivimos aqui, aun si no vivimos
y solo el misterio enmarañado de lo terrible
sigue ahi, sin alguna duda
¿que viento pudiera transportar este cementerio de reflejos?
Tan tristes
Tan nuestros
martes, 21 de junio de 2011
Somos soledades
¿Existe más absurdo objetivo,
que el de la serpiente que pretende seducir con una flauta mágica?
Sean las palabras del tamaño de un árbol de lamentaciones
y la voz un turbio y luminoso flujo bajo la tierra
¿Existe nuestra voluntad después de la orilla?
Solo en horas amarillas, rojas y azules
con las que madrugadas de ala cerrada tiñen nuestra tumba
Y en el eterno cielo de Septiembre
en su definitivo temblor de una vida sin muros
que sonríe sobre nuestro siglo de insomnios
Somos soledades coronadas, placeres cautivos
y el eco donde resonó el hastío
Somos el ruido de casas viejas
que el roce de una imaginación infantil
convierte en monstruos, gigantes y tiranos
el hielo sordo que florece en los murmullos
y un abismo que gira locamente buscando el instante de los cuerpos
¿Existe mejor veneno que los días largos de noches cortas?
¿Que la palabra ardiente y desoída?
¿Que los hombres más valientes abandonados?
¿Que las virtudes de vírgenes hipócritas?
Solo despertar con nuestro cuerpo aun caliente entre las manos
mientras la noche busca sus estrellas en estos labios entre abiertos
que el de la serpiente que pretende seducir con una flauta mágica?
Sean las palabras del tamaño de un árbol de lamentaciones
y la voz un turbio y luminoso flujo bajo la tierra
¿Existe nuestra voluntad después de la orilla?
Solo en horas amarillas, rojas y azules
con las que madrugadas de ala cerrada tiñen nuestra tumba
Y en el eterno cielo de Septiembre
en su definitivo temblor de una vida sin muros
que sonríe sobre nuestro siglo de insomnios
Somos soledades coronadas, placeres cautivos
y el eco donde resonó el hastío
Somos el ruido de casas viejas
que el roce de una imaginación infantil
convierte en monstruos, gigantes y tiranos
el hielo sordo que florece en los murmullos
y un abismo que gira locamente buscando el instante de los cuerpos
¿Existe mejor veneno que los días largos de noches cortas?
¿Que la palabra ardiente y desoída?
¿Que los hombres más valientes abandonados?
¿Que las virtudes de vírgenes hipócritas?
Solo despertar con nuestro cuerpo aun caliente entre las manos
mientras la noche busca sus estrellas en estos labios entre abiertos
martes, 31 de mayo de 2011
Apuntes (tardios) sobre "Tron: el Legado"
Puedo decir, con toda certidumbre, que después de ver (finalmente) la cinta "Tron: El legado" (Disney 2010) soy un sobreviviente. Hasta ahora no tengo una compulsión por los videojuegos, ni ha surgido la necesidad volatil de marcar el adoquin de las calles con las llantas de una Ducatti, ni he comenzado a sentirme abrumado por la belleza de mujeres de cabello castaño y lacio con piel de porcelana china. Así que para mí esta prueba ha resultado más que benéfica; la agresiva campaña publicitaria en la película dirigida a potenciales consumidores no ha hecho estragos.
Y no solo eso, tambien puedo decir que varias de las cosas más positivas de una obra de arte están dentro de esta producción.
POr un lado reafirma el discurso cinematográfico. Así como hay momentos que solo la música puede sugerir, pasajes por los que la literatura nos puede llevar u horizontes que una obra gráfica puede abrir, existe en las películas un fenomeno muy particular entre rec y stop; convinación efectiva en el ritmo que cosntruyen imagenes y sonido y que es dominada con maestría en este filme.
Uno de los aspectos que me parecen de mayor importancia en la cinta es que se presenta este universo virtual como un limbo cerrado donde angustia, sospecha y soledad a traviezan al individuo y a su entorno.
Aqui la solución (que corona además la honestidad de sus creadores) es presentar triunfal, abierta, luminosa y con un viento renovador la persistencia de lo real, de la vida en directo y de la experiencia fuera de este universo manipulado tecnologicamente.
Por lo pronto si no eres de los tantos que acudimos a las salas de cine motivados por los efectos especiales, el soundtrack o por los amigos, ve preparado a esgrimir una defensa contra una constante voz de compra-compra.
martes, 24 de mayo de 2011
En noches ciegas dirán tu nombre- por Paola Klug y Víctor Sierra
Porque su piel es la tierra y su oído los rios
Y nuestros pies raíces
Por eso la palabra es fruto
Y sus ojos viento.
Y su silencio canción de arena
Y sus cabellos mar
Donde anidan abismos y niebla
Y una tumba de poetas
Donde un corazón negro guarda sus sueños
y suspiros
Por eso noches ciegas dirán tu nombre
solo los poetas mudos
Que guarden en su pecho su ultimo canto para después de muertos
y sus ojos y su tacto para volar conmigo.
Y al fin tocar un astro perpetuo que corone el cielo
y llorar vacíos, y besar misterios
Solo así sabremos que no hemos muerto
Y nuestros pies raíces
Por eso la palabra es fruto
Y sus ojos viento.
Y su silencio canción de arena
Y sus cabellos mar
Donde anidan abismos y niebla
Y una tumba de poetas
Donde un corazón negro guarda sus sueños
y suspiros
Por eso noches ciegas dirán tu nombre
solo los poetas mudos
Que guarden en su pecho su ultimo canto para después de muertos
y sus ojos y su tacto para volar conmigo.
Y al fin tocar un astro perpetuo que corone el cielo
y llorar vacíos, y besar misterios
Solo así sabremos que no hemos muerto
domingo, 15 de mayo de 2011
De complementos
A La combinación exacta para despojaste de tu traje de ira le falta un elemento, y no es tu misión encontrarla, es tu deber retenerla
lunes, 9 de mayo de 2011
Soledad y lengua
Dejamos de tener un rostro
antes de que nuestra voz fuera piedra
y el aliento árido resquicio de lanzas y maravillas
Dejamos de pertenecer al sol cuando el silencio se hizo estrella
y nuestra lengua ademán autocritico
cuando nuestra fiel ternura
dejó de entregarse a la muerte
fuimos por siempre forma original en movimiento
Pero somos ciertos en querer andar a ciegas
Da el cuerpo la miel quemada
Nadie bajo ninguna sombra
Guardó su voz
Ni encontró tu nombre como desengaño
Nadie advirtió las islas de aire prisionero
de sangre y cenizas
donde se batía el recuerdo con la esperanza
y la soledad de dos
Así, tus manos de polvo hicieron caricias desiertas
y el pulso de la noche, tormentas de ala fatigada
No era encontrarte, ni andar en bosques de abismos
era no ser
era abrir las alas y dejarse ir
Guardó su voz
Ni encontró tu nombre como desengaño
Nadie advirtió las islas de aire prisionero
de sangre y cenizas
donde se batía el recuerdo con la esperanza
y la soledad de dos
Así, tus manos de polvo hicieron caricias desiertas
y el pulso de la noche, tormentas de ala fatigada
No era encontrarte, ni andar en bosques de abismos
era no ser
era abrir las alas y dejarse ir
viernes, 29 de abril de 2011
Retrospectiva
Hacia tiempo que el frio daba forma al viento. Que su sinfonia vencia ramas secas y que en la simetria de luz y jardines abria su pecho un corazón eléctrico; hacia un mes que musitaba el nuevo año viejas plegarias.
Allá se inauguraron como padres, sin la edad y sin la verdad, pero con una certeza de fuego y gorriones, de humanidad y fantasia.
Transcurrieron en oscuridad algunos años, hasta que la fuerza del vértigo trepó por la espina del nuevo ser. De caminos secretos y labios dormidos surgieron canciones, mientras al fondo de la calles tronaba un cielo de nubes negras.
Desde entonces una niebla cruza la garganta y oceanos rojos trazan las caricias, el tejido elemental regresa a su nido y desde entonces de dia suben las miradas y de noche bajan las estrellas.
Allá se inauguraron como padres, sin la edad y sin la verdad, pero con una certeza de fuego y gorriones, de humanidad y fantasia.
Transcurrieron en oscuridad algunos años, hasta que la fuerza del vértigo trepó por la espina del nuevo ser. De caminos secretos y labios dormidos surgieron canciones, mientras al fondo de la calles tronaba un cielo de nubes negras.
Desde entonces una niebla cruza la garganta y oceanos rojos trazan las caricias, el tejido elemental regresa a su nido y desde entonces de dia suben las miradas y de noche bajan las estrellas.
lunes, 25 de abril de 2011
Sátira doméstica
Yo no deje mis cosas ahi nada más, las acomodé metodicamente en las orillas,lejos de donde precipitaran una caida o un disgusto en los pies al chocar involuntariamente sobre ellas.
Es el desorden que las enmaraña y camina entre ellas, es el largo tiempo sin mirarlas lo que las amanece caoticas.
Habrá definitivamente mundos estructurados que las descubran.
Pero entre mis cazuelas y mi ropa se gestó la certeza, el tiempo que en su afán dictador nos recuerda que no ahondamos sobre su desarrollo cromático y así de súbito caen en desuso, así como la casa ya tomada y el gorrión que decidió hacer nido en mi ventana.
Dios mediante esa no sea razón de matrimonio.
Es el desorden que las enmaraña y camina entre ellas, es el largo tiempo sin mirarlas lo que las amanece caoticas.
Habrá definitivamente mundos estructurados que las descubran.
Pero entre mis cazuelas y mi ropa se gestó la certeza, el tiempo que en su afán dictador nos recuerda que no ahondamos sobre su desarrollo cromático y así de súbito caen en desuso, así como la casa ya tomada y el gorrión que decidió hacer nido en mi ventana.
Dios mediante esa no sea razón de matrimonio.
viernes, 1 de abril de 2011
Carne ciega
Tus labios se dan en la sombra
Como una lengua de fuego
Como una oscuridad ahogada
Por eso debajo espero una geografía
Sin fronteras
Sin mentiras
Donde un secreto abismo
Mire hacia adentro
Y donde las miradas se busquen
Y no se estrellen contra su ansia
Pero tu
Tan desierta
como hoja de niebla
Caes al primer roce del otoño
Como una lengua de fuego
Como una oscuridad ahogada
Por eso debajo espero una geografía
Sin fronteras
Sin mentiras
Donde un secreto abismo
Mire hacia adentro
Y donde las miradas se busquen
Y no se estrellen contra su ansia
Pero tu
Tan desierta
como hoja de niebla
Caes al primer roce del otoño
viernes, 18 de marzo de 2011
En el mar, sobre las naves- Walt Whitman
En el mar, sobre naves alveoladas de camarotes,
El azul sin límites se extiende por doquiera,
Con los vientos que silban y la música de las ondas, de las
grandes imperiosas ondas;
O bien, en alguna barca solitaria, llevada sobre el denso
mar,
O gozoso y lleno de fe, desplegando sus blancas velas,
En el barco que hiende el éter entre la espuma relampa-
gueante del día, ó de noche, bajo las innumerables estrellas,
Quizá será leído por marineros jóvenes ó viejos, como un
recuerdo de la tierra,
En plena concordancia con mi fin.
miércoles, 9 de marzo de 2011
lunes, 28 de febrero de 2011
Una palabra
Voy a sembrar una palabra en tu cuerpo,
que te busque en silencio mientras agita el viento tus cabellos
Que crezca tibia en tu vientre
Y arda en el sol de tus labios
Para no salir, para no perderte
Voy a tocar con una palabra
con una lluvia oscura
con una sed sin orilla
esta angustia muda
que comienza bajo tu espalda
Y te detendré al vuelo
y te daré vuelta
para inventar los por siempre
debajo de las sábanas
Entonces dirás noche y acudirán ríos
pensarás en cielo y reventará el deseo
y al soñar, solo incendios
levantarás el vuelo y será finito el cielo
entonces me salvarás
recordándome
Y en tu voz una palabra hablará como mano abierta
de la soledad que anudan las mañanas
Donde el oceano es un miedo blanco
perfecto exacto
que se arroja sobre tus pies de arena
que te busque en silencio mientras agita el viento tus cabellos
Que crezca tibia en tu vientre
Y arda en el sol de tus labios
Para no salir, para no perderte
Voy a tocar con una palabra
con una lluvia oscura
con una sed sin orilla
esta angustia muda
que comienza bajo tu espalda
Y te detendré al vuelo
y te daré vuelta
para inventar los por siempre
debajo de las sábanas
Entonces dirás noche y acudirán ríos
pensarás en cielo y reventará el deseo
y al soñar, solo incendios
levantarás el vuelo y será finito el cielo
entonces me salvarás
recordándome
Y en tu voz una palabra hablará como mano abierta
de la soledad que anudan las mañanas
Donde el oceano es un miedo blanco
perfecto exacto
que se arroja sobre tus pies de arena
jueves, 17 de febrero de 2011
En bemol
Así como trás el dolor se esconden tus ojos
el mar encierra sus misterios
en abismos donde la luz no interfiere
así como trás los sueños
se esconden incontables secretos
permanece sobre mí el tiempo
en que dejé ir una palabra que
te encadenara
y si alguien me dijera que dejé de escuchar
tu voz sobre la partitura,
sabré entonces, que es fácil dejar una vida entera para encontrarte de nuevo
ojalá el aire que esta mañana logro con mi soledad
tenga un silencio en el que una hoja pase sobre otra
y así un verso sobre el silencio
me encuentre desnudo sobre la arena del tiempo
en que dos tenia un nombre
y la verdad una fuerza
en que pueda reconocerte
si es así de fácil dejarte sobre las palabras que no resuenan
porque entonces tarda la vida tanto
en tocar mis labios con sus dedos
para callarlos
para dibujarles una luz que no se precipite sobre
este sabor a distancia
el mar encierra sus misterios
en abismos donde la luz no interfiere
así como trás los sueños
se esconden incontables secretos
permanece sobre mí el tiempo
en que dejé ir una palabra que
te encadenara
y si alguien me dijera que dejé de escuchar
tu voz sobre la partitura,
sabré entonces, que es fácil dejar una vida entera para encontrarte de nuevo
ojalá el aire que esta mañana logro con mi soledad
tenga un silencio en el que una hoja pase sobre otra
y así un verso sobre el silencio
me encuentre desnudo sobre la arena del tiempo
en que dos tenia un nombre
y la verdad una fuerza
en que pueda reconocerte
si es así de fácil dejarte sobre las palabras que no resuenan
porque entonces tarda la vida tanto
en tocar mis labios con sus dedos
para callarlos
para dibujarles una luz que no se precipite sobre
este sabor a distancia
Cuando muera
cuando muera recuperaré mis alas de luminosos bordes
de luna sobre la que escurre un silencio
y al humo en madrugada
contaré las espinas blancas sobre mis labios
y las arrojaré al nuevo incendio
Pensaré también en el ritmo negro
que trazaste sobre la piel
que la casualidad tejió a tus manos
cuando muera espero
el suspiro de los necios avanzado tierra adentro
como aves blancas buscando nido
y espero encontrarmé una estación de lluvias
en la que solo dos compartan su alegría
de luna sobre la que escurre un silencio
y al humo en madrugada
contaré las espinas blancas sobre mis labios
y las arrojaré al nuevo incendio
Pensaré también en el ritmo negro
que trazaste sobre la piel
que la casualidad tejió a tus manos
cuando muera espero
el suspiro de los necios avanzado tierra adentro
como aves blancas buscando nido
y espero encontrarmé una estación de lluvias
en la que solo dos compartan su alegría
martes, 15 de febrero de 2011
¿Quién abre su pecho?
Los misterios hacen del universo un arco y de la verdad una flecha con la punta envenenada
No existe el sol menos que tu vida
Tenía una sombra colgada de los labios y no quise escurrirla en nuestros sueños
Aunque siempre celebre el espacio en el que aleteaban las miradas
Frente al miedo siempre un arma, frente a la muerte nunca las suficientes caricias
Aunque siempre celebre el espacio en el que aleteaban las miradas
Frente al miedo siempre un arma, frente a la muerte nunca las suficientes caricias
viernes, 4 de febrero de 2011
Abierta la noche
Parió la noche una luna solitaria, tenue, habitada solo por miradas náufragas. Dentro ese limbo de silencio, entibiaban sus manos.
Convocaban al tiempo y acudia la niebla, acercaban los labios y entre ellos la claridad del dia y mientras su piel celebra lo que no muere, se abre al corazón el horizonte.
Convocaban al tiempo y acudia la niebla, acercaban los labios y entre ellos la claridad del dia y mientras su piel celebra lo que no muere, se abre al corazón el horizonte.
balas (ojalá no de salva)
si las armas no hieren o cimbran es:
a) porque no tienen la suficiente pólvora
b) porque disparan a objetivos muertos
A ti, ¿te gusta la poesía?
a) porque no tienen la suficiente pólvora
b) porque disparan a objetivos muertos
A ti, ¿te gusta la poesía?
lunes, 17 de enero de 2011
Un madrazo a la vez
Cuando leo algo como:
Revienta el sol
y se derrumba
por refrescarse en tu alegria.
Revientan olas de tu pecho
Yo me baño en tu risa
Olas, nubes y soles
y playas desbordadas.
Tu risa es la creación
feliz de ser amada
("Oleajes", recogido De "El corno emplumado", Gabriel Zaid)
Cierro mi libro y comienzo a imaginar al mundo como aliado. Entonces en la esquina inferior de la pasta, como agazapado veo un letrerito amarillo con la leyenda: "Gandhi, $119", y es completa mi felicidad. Acercarme a la libertad un paso más tiene un precio ridículo, risible, aqui el sistema de "compra+compra= ser amado y feliz", se ha llevado un señor chigadazo.
Revienta el sol
y se derrumba
por refrescarse en tu alegria.
Revientan olas de tu pecho
Yo me baño en tu risa
Olas, nubes y soles
y playas desbordadas.
Tu risa es la creación
feliz de ser amada
("Oleajes", recogido De "El corno emplumado", Gabriel Zaid)
Cierro mi libro y comienzo a imaginar al mundo como aliado. Entonces en la esquina inferior de la pasta, como agazapado veo un letrerito amarillo con la leyenda: "Gandhi, $119", y es completa mi felicidad. Acercarme a la libertad un paso más tiene un precio ridículo, risible, aqui el sistema de "compra+compra= ser amado y feliz", se ha llevado un señor chigadazo.
Lo extraordinario de lo no permitido
-...Pero yo, cuando te lo hice, aunque fue solo una vez, me dejaste de hablar por dias-
-cuando eso paso sabes que no estabamos bien-
-¿si?, pués no me digas que entonces te tapaste los ojos-
-pero si tu tambien lo permitiste, incluso lo propiciaste-
En la mesa de a lado una pareja discute. Él en un intento desesperado, frontal y al mismo tiempo un tanto temeroso, trata de revivir su relación, entonces entiendo que al fondo de todo reclamo hay siempre una súplica malentendida y que a los oceanos no se los traga ningún abismo.
-cuando eso paso sabes que no estabamos bien-
-¿si?, pués no me digas que entonces te tapaste los ojos-
-pero si tu tambien lo permitiste, incluso lo propiciaste-
En la mesa de a lado una pareja discute. Él en un intento desesperado, frontal y al mismo tiempo un tanto temeroso, trata de revivir su relación, entonces entiendo que al fondo de todo reclamo hay siempre una súplica malentendida y que a los oceanos no se los traga ningún abismo.
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